TOMA NUESTRAS MANOS

Prestame tus aterciopeladas y suaves manos tendidas dulce y desinteresadamente a la ardua labor.

Ha llegado la hora de renovar mis plumas y emprender el vuelo, pero mi atenazado y algunas veces aún amordazado pico por el silencio ante la duda entre lo correcto y lo incorrecto, no es sabedor aún de su necesaria función, de su necesaria intervención para ello, a veces es como si no recordara.

Por eso, necesito de ti, por eso necesito que me prestes tus cálidas y acogedoras manos, como llegará el día que tu necesitarás en tu vuelo las mías.

Según está escrito, solo las manos del amor y la amistad han de ser las elegidas por el destino para ello, para arrancar mis plumas que se agolpan y crecen con anárquica determinación haciendo que mi majestuoso vuelo se ensombrezca por lo desaliñado de mis alas.....mis bellas alas....majestuosas alas extendidas con toda su grandeza al impasible viento que todo lo borra y todo lo limpia.

Si, ha llegado la hora, mis plumas quieren y necesitan vestir su más radiante y seductora belleza ante la magnificencia del eterno vuelo, por eso......por favor, prestame tus manos, tus cálidas manos.

Mis retorcidas garras en el intento de aferrarse algunas veces a lo único que existía, más por supervivencia que por fe, han perdido la mágica conciencia de su ser y queriendo retener en el aprendizaje cuando debían soltar, han perdido su fuerza y eficacia, y solo la recuperarán con el corazón abierto ante el valeroso acto de perdón y el propio conocimiento.

Ave en vuelo soy como tú, y entre nosotros sabemos cuando apremia la necesidad y la mano que todo lo crea, acaricia con bondad nuestro plumaje ante la llegada del momento de renacer y renovarse.

Claros son los indicios de ello sentidos en cada poro de la piel, ahora lo sé como tu lo has sabido y como otros lo sabrán, porque aún conociendo lo comenzado a escribir en el libro de nuestro camino el día de la primera elección, hay cosas que solamente seremos capaces de ver, cuando nuestros ojos estén preparados para ver con el corazón alumbrado por la más bella, pura y blanca luz de nuestra alma.

Mirame.....mira la humilde fortaleza de mi nuevo pico, ya ha recordado lo necesario para expresar dentro del más hermoso silencio como corresponde a la pureza del alma del águila que soy.....mis ojos......mira mis ojos......profundos....mira su brillo, son capaces de ver ahora más allá, ven el interior, sobre todo el mio. Mis garras......mis nuevas garras que ahora sirven en la humildad más para dar que para coger y para sostener más que para retener absurdamente.....que garras más hermosas.....ahora saben para que fueron creadas.

! Y mis alas!....!! Mira mis alas !!.....Dios, cuanta belleza, que hermosura desplegadas majestuosas fundiéndose en armonía con el viento ,reflejando la luz del sol, suaves, firmes, brillantes y curvilíneas alas repletas de las mas hermosas plumas que recordaba.

Sólo hay una cosa en la grandeza del universo comparable en hermosura a la de mis renovadas plumas, tus manos, gracias por prestarme tus aterciopeladas y cálidas manos.....tus firmes manos, ahora......ahora queda algo más por hacer, hacer que sepas que, aquí tendrás las mías cuando seas tu quien las necesite llegada tu hora herman@, mi corazón y yo, te damos las gracias por prestarnos tus hermosas manos, y nos despedimos de ti, en este maravilloso día, con un fraternal abrazo y ofreciéndote las ahora tuyas......nuestras manos